En el marco del ciclo de charlas organizadas por la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM), Jaime Arteaga, Director de JA&A y cocreador del Encuentro Latinoamericano de Minería (ELAMI), presentó los resultados del estudio “Brújula Minera”. Este informe analiza las percepciones y expectativas sobre la minería y el estado de la licencia social en diversos países de la región.
El estudio, que se realiza anualmente desde hace cuatro años en diez países latinoamericanos, proporciona una visión detallada sobre cómo la opinión pública percibe la industria minera, las conversaciones que se generan en torno a ella, y las expectativas e inquietudes de las comunidades afectadas. Jaime Arteaga, experto en opinión pública y reputación corporativa, destacó varios aspectos positivos que han surgido en el último año.
Incremento del conocimiento sobre la minería y la transición energética
Uno de los hallazgos más relevantes del “Brújula Minera” es el aumento en el conocimiento de la relación entre la minería y las tecnologías necesarias para la transición energética. Este vínculo ha generado un mayor apoyo por parte de la opinión pública hacia la industria minera, al reconocer la importancia de los minerales en la producción de tecnologías limpias y sostenibles. La transición hacia fuentes de energía renovable, como la solar y la eólica, depende en gran medida de minerales como el litio, el cobre y el níquel, que son fundamentales para la fabricación de baterías y otros componentes tecnológicos.
Reducción de posturas radicales
Otro aspecto positivo destacado por Arteaga es la notable disminución de las posiciones más radicales en contra de la minería. Según el estudio, el 65% de los consultados ahora cree que una minería bien hecha puede traer desarrollo para las regiones donde opera. Este cambio en la percepción se debe, en parte, a los esfuerzos de las empresas mineras por mejorar sus prácticas ambientales y sociales, así como a la implementación de proyectos de desarrollo comunitario que benefician directamente a las localidades donde se realizan actividades mineras.
Desafíos persistentes y la necesidad de licencia social
A pesar de estos avances, la industria minera todavía enfrenta múltiples desafíos. La obtención y mantenimiento de la licencia social para operar sigue siendo un tema crucial. Las comunidades locales y las organizaciones no gubernamentales continúan demandando prácticas responsables y transparentes por parte de las empresas mineras. La licencia social se refiere al consentimiento informal y continuo de la comunidad local para que una empresa opere en su área. Este concepto ha ganado importancia en los últimos años, ya que las comunidades se han vuelto más conscientes de su poder para influir en las operaciones mineras.
Perspectivas futuras
El estudio “Brújula Minera” sugiere que, para consolidar los avances logrados, la industria minera debe seguir enfocándose en la sostenibilidad y la responsabilidad social. Las empresas deben continuar trabajando en estrecha colaboración con las comunidades locales, asegurando que los beneficios de la minería se distribuyan de manera equitativa y que los impactos ambientales se minimicen. Además, es fundamental que las empresas mantengan una comunicación abierta y transparente con todas las partes interesadas, para construir y mantener la confianza.
En conclusión, aunque la minería en Latinoamérica ha experimentado mejoras significativas en su percepción pública, es vital que la industria continúe esforzándose por superar los desafíos persistentes y garantizar que sus operaciones sean sostenibles y socialmente responsables. El estudio “Brújula Minera” ofrece una hoja de ruta para que las empresas mineras puedan navegar estos desafíos y aprovechar las oportunidades que se presentan en el contexto de la transición energética.