Argentina, parte del «Triángulo del Litio» junto a Chile y Bolivia, se posiciona como uno de los actores claves en la producción de este mineral estratégico. El litio, antes utilizado principalmente en sectores industriales como la fabricación de vidrios y cerámicas, ha cobrado mayor relevancia en la actualidad debido a su papel esencial en la transición hacia energías limpias y sostenibles.
La creciente demanda de vehículos eléctricos (EVs) y otros dispositivos recargables ha impulsado la necesidad de litio a nivel global. Según la Asociación Internacional de Energía (IEA), se espera que las ventas de automóviles eléctricos alcancen los 17 millones de unidades para 2024, lo que representa más del 20% de los automóviles vendidos a nivel mundial. Este cambio hacia la electromovilidad es uno de los principales motores del aumento en la producción de litio.
En el escenario global, cuatro países —Australia, China, Chile y Argentina— concentran más del 95% de la producción mundial de litio. Aunque Australia sigue siendo el mayor productor, su participación ha disminuido en términos porcentuales, mientras que Chile y China han experimentado un crecimiento notable. En cuanto a Argentina, su participación en la producción mundial oscila entre el 5% y el 7%, con expectativas de crecimiento sostenido.
La Secretaría de Minería de la Nación ha identificado alrededor de 40 proyectos de litio en diferentes etapas de desarrollo. Recientemente, se sumó una nueva operación a los tres centros productivos ya existentes, mientras otros cuatro emprendimientos se encuentran en construcción. Este impulso refuerza las proyecciones positivas para el sector del litio en Argentina, que además ha visto un incremento en sus exportaciones, representando un 21% en 2023 frente al 8% en 2018.
El desafío a futuro radica en capitalizar esta oportunidad de crecimiento, garantizando que la extracción y el uso del litio se realicen de manera sustentable. Las políticas gubernamentales y las inversiones serán claves para asegurar que Argentina continúe siendo un actor central en la industria del litio y en la transición hacia un mundo más verde.